La desintegración de la URSS

El 17 de marzo de 1991 se celebró un referéndum en la Unión Soviética, con un 76 % de votos afirmativos para constituir un nuevo Tratado de la Unión, que pretendía convertirla en una federación de repúblicas independientes, con políticas militar y exterior y presidente comunes. Fue un intento de Mijaíl Gorbachov, presidente desde 1985, de mantener unido al Estado.

El bloque socialista liderado por la URSS desde 1945 había desaparecido ya, tras la renuncia al comunismo de sus miembros los dos años anteriores. En agosto de 1989 accedió al Gobierno de Polonia el partido conservador Solidaridad. En octubre, en Hungría, se disolvió el Partido Comunista y en marzo de 1990 el derechista Foro Democrático llegó al poder. Para entonces ya había caído el muro de Berlín, en noviembre de 1989; en las elecciones de marzo de 1990 ganó la derecha y Alemania se reunificó en octubre de 1990. En diciembre de 1989, el conservador Foro Cívico llegó al Gobierno de Checoslovaquia (país que se partió en dos en 1993). Ese mismo mes, Ceaucescu fue ejecutado en Rumanía y en mayo de 1990 ganó las elecciones el antiguo Partido Comunista, reconvertido en socialdemócrata. Lo mismo sucedió al mes siguiente en Bulgaria.

El 1 de julio de 1991 se disolvió el Pacto de Varsovia, acuerdo militar de 1955 entre los países comunistas europeos. El 12 de julio de 1991, un año después de abandonar el Partido Comunista, Borís Yeltsin fue elegido presidente de Rusia. El 19 de agosto, un día antes de la prevista ratificación del Tratado de la Unión, un grupo de militares encabezado por el presidente del KGB Vladímir Kriuchkov promovió un intento de golpe de Estado, Gorbachov fue secuestrado en sus vacaciones en Crimea y el vicepresidente Gennadi Yanáyev asumió el cargo de presidente de la URSS.

Borís Yeltsin, apoyado por los Estados Unidos, se subió a uno de los tanques que protegía el Parlamento ruso y se dirigió a la multitud denunciando el golpe y convirtiéndose en líder popular. El 21 de agosto la intentona fue desactivada, y el proyecto de Gorbachov de mantener la Unión se fue desmoronando, debido en gran parte a la repulsiva actuación de su principal enemigo político interno, el renegado Yeltsin, agente de la escoria neoliberal antihumanista.

El 9 de abril de 1991, Georgia ya había declarado su independencia, siguiendo la estela de Lituania del 11 de marzo de 1990, y de Estonia y Letonia, mediante referéndum del 3 de marzo de 1991. El 24 de agosto, Ucrania hizo lo propio. El 27, Moldavia; el 30, Azerbaiyán; el 31, Kirguistán. El 6 de septiembre se reconoció la independencia de Estonia, Letonia y Lituania. El 9, Tayikistán declaró la suya; el 21, Armenia; el 27 de octubre, Turkmenistán. Ya sólo quedaban en la URSS Rusia, Bielorrusia, Kazajistán y Uzbekistán.

La desintegración de facto de la Unión Soviética era la misión del traidor Yeltsin, que pasó de proclamarse ateo a ortodoxo y prohibió el Partido Comunista el 6 de noviembre de 1991. El 8 de diciembre y con la oposición de Gorbachov, Borís Yeltsin se reunió con los presidentes de Ucrania y Bielorrusia para crear la Comunidad de Estados Independientes (CEI), que sustituyó al Tratado de Creación de la URSS de 1922. El 21 se firmó el Protocolo de Almá-Atá, en el que 11 de las 15 ex repúblicas soviéticas se unieron a la CEI. Quedaron fuera Estonia, Letonia, Lituania y Georgia.

El 25 de diciembre de 1991, Gorbachov anunció su dimisión, la bandera con la hoz y el martillo fue arriada y la URSS dejó de existir. En enero de 1992, Yeltsin comenzó a privatizar Rusia dirigido por Estados Unidos, dejándola en manos de un reducido grupo de oligarcas y sumiendo a millones de habitantes en la pobreza extrema. Al año siguiente, Yeltsin bombardeó y destruyó el edificio del Parlamento. Tras su dimisión en 1999, le sucedió Vladímir Putin.

Más información:
...Y el Muro de Berlín cayó sobre nosotros
La importancia del Partido Comunista
La última cena comunista
En torno al comunismo y el PCE
Las internacionales, sus ideólogos y sus postulados
Repúblicas populares
Artistas comunistas
Obrero y koljosiana