Doce de Howard Hawks



Howard Hawks (1896-1977) dirigió 47 filmes, de los más variados géneros: cine negro, comedias, western, de aventuras, dramas, bélicas, de ciencia ficción...  Era considerado un artesano hasta los años cincuenta, cuando la crítica francesa puso en valor como autores a los directores clásicos de Hollywood.

Se dice de él que es un director vitalista, y a la vez sobrio y austero. Una de sus temáticas más repetidas es la amistad masculina. Por lo general, los guiones en los que se basan sus obras son poco profundos y estereotipados, aunque hay de todo. No confundir con su parónimo Howard Huges (1905-1976), también aviador, director y productor. Las doce películas seleccionadas dan una idea de su importancia en la historia del cine; sin llegar a ser uno de los grandes, ha dejado al menos cuatro cintas imperecederas.

1932 Scarface **
Auge y caída de un hampón, trasunto de Al Capone. Acartonada y sin ritmo, sin embargo es considerada una de las bases del cine de gánsteres e influencia de El Padrino. En 1983, Brian de palma filmó un famoso remake.

1938 La fiera de mi niña **
Un paleontólogo despistado (Cary Grant) se encuentra con una joven alocada que tiene un leopardo (Katharine Hepburn). Cúmulo de niñerías superficiales, muchos la tienen por una de las mejores comedias de la historia del cine.

1939 Sólo los ángeles tienen alas ****
Una empresa de transporte aéreo en los Andes concita muertes cotidianas, camaradería, romance y aventuras. Con Cary Grant y Rita Hayworth de secundaria. Sólida e inteligente película que mantiene el interés. Un ejemplo de que en 1939 hubo buena cosecha de cine.

1940 Luna nueva ****
Comedia trepidante y ácida sobre la cara más podrida del periodismo, con el añadido de un trío amoroso. Al final, triunfa la mezquindad. Protagoniza Cary Grant. La obra de teatro ha sido llevada al cine cuatro veces, de las que destaca también Primera plana (Billy Wilder, 1974).

1941 Bola de fuego ***
Divertida comedia romántica sobre un grupo de estudiosos en el que irrumpe una bella joven, poniendo su mundo patas arriba. Protagoniza Gary Cooper. En 1948, el propio Hawks hizo un remake musical, Nace una canción.

1944 Tener y no tener *****
En un ambiente bélico del Caribe, Humphrey Bogart, en un personaje similar al de Casablanca, conoce a una joven, interpretada por Lauren Bacall en su debut. Estupenda, ingeniosa y emocionante, con un ritmo tranquilo y perfecto.

1946 El sueño eterno **
Clásico del cine negro, con el detective Philip Marlowe encarnado por Bogart y secundado por Lauren Bacall. Su argumento es un lío, lo que hace que acabes aburriéndote, por mucho encanto que destilen algunas escenas. Tan mítica como prescindible.

1948 Río Rojo ***
Un vaquero maduro y uno joven (John Wayne y Montgomery Clift) llevan su ganado de Texas a Kansas, con muchos contratiempos. Por momentos, funciona como documental de vacas. Interesante, pero un poco pesada.

1952 Me siento rejuvenecer **
Comedia sobre un científico (Cary Grant) que investiga un método de rejuvenecimiento. Participación estelar de Marilyn como secundaria, de un chimpancé y de un bebé. Bobada intrascendente.

1953 Los caballeros las prefieren rubias ****
Comedia musical sobre dos cabareteras en busca del amor. Pese al argumento ñoño, la realización ágil y desenfadada, la incorporación de números musicales estimables y la rotunda presencia de Marilyn Monroe elevan su rango.

1959 Río Bravo ***
Entretenido western clásico con camaradería, sheriff, malos, bella dama, buenos secundarios, etc. En 1966, Hawks hizo un remake, El Dorado, que con Río Lobo (1970) conforman una trilogía de argumentos similares protagonizada por John Wayne.

1962 ¡Hatari! **
Un rancho africano de caza de animales para zoos, regentado por John Wayne, recibe la visita de una bella fotógrafa italiana (Elsa Martinelli). Divertido tema principal de la banda sonora de Henri Mancini, que se hizo célebre. El resto, olvidable.

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