Feministas ilustradas
La Ilustración fue un movimiento político del siglo XVIII
que reivindicó la razón y el progreso, asentado sobre la base de la revolución
científica precedente. El feminismo nació en el seno de la Ilustración, cuando
algunas mujeres pioneras plantearon la igualdad entre sexos.
El texto más importante de la Ilustración fue la Declaración de los Derechos del Hombre y del
Ciudadano, aprobada en 1789, al inicio de la Revolución francesa. La
respuesta femenina llegó en 1791, cuando Olympe de Gouges proclamó la Declaración de los Derechos de la Mujer y la
Ciudadana, dando el pistoletazo de salida del feminismo contemporáneo.
A continuación ofrezco una selección de biografías de quince
mujeres de la Ilustración, incluyendo escritoras, políticas y científicas de
varios países europeos.
Olympe de Gouges (Montauban, 1748-París, 1793) fue una
escritora y política francesa que defendió la igualdad de la mujer, la
abolición de la esclavitud, el divorcio y los derechos de los hijos “naturales”.
Tras redactar en 1791 la Declaración de
los Derechos de la Mujer y la Ciudadana, en 1792 escribió la obra de teatro
La esclavitud de los negros. En la
Revolución francesa tomó partido por los girondinos (revolucionarios
moderados), por lo que acabó siendo guillotinada por los jacobinos en el poder.
Mary Wollstonecraft (Londres, 1759-1797), escritora inglesa
precursora del feminismo, escribió en 1792 el ensayo Vindicación de los derechos de la mujer. En él reivindicaba el
derecho a la educación para las mujeres. Esta tesis ya la había defendido en su
obra Relatos originales de la vida real (1788),
dirigida al público infantil. Fue la madre de Mary Shelley, autora de Frankenstein, tras cuyo parto contrajo
una infección que provocó su muerte.
Isabelle de Charrière (Utrecht, 1740-Colombier, 1805) fue
una escritora holandesa que apoyó y noveló la Revolución francesa. En su obra
defendió la igualdad entre hombres y mujeres, negando las tesis naturalistas de
Rousseau. De ideas muy avanzadas, sostuvo en su novela Tres mujeres (1796) que el sexo no determina la identidad del
individuo.
Etta Palm (Groninga, 1743-La Haya, 1799) fue una cortesana y
espía holandesa implicada en la Revolución francesa. Escribió textos a favor de
la igualdad de sexos. Fundó en París en 1791 la Sociedad Patriótica y de
Beneficencia de Amigas de la Verdad, para la defensa de los derechos de las
mujeres. En 1795 fue acusada de orangista (contraria a la invasión francesa de
Holanda) y encarcelada en Woerden durante tres años.
Théroigne de Méricourt (Marcourt, 1762-París, 1817), fue una
política de la Revolución francesa, nacida en Lieja, actual territorio de
Bélgica. Defendió los derechos de las mujeres, convirtiéndose en blanco de
difamación de los contrarrevolucionarios. En 1792 propuso un cuerpo armado femenino.
Representa el arquetipo de la mujer revolucionaria que empuña las armas. En
1794 fue declarada demente e internada durante 23 años, hasta su muerte.
Claire Lacombe (Pamiers, 1765-París, 1826). Actriz y
revolucionaria francesa, propuso la creación de batallones femeninos. En 1792
participó en el asalto a las Tullerías que puso fin a la monarquía. En 1793 fundó
con Pauline Léon la Sociedad de las Mujeres Republicanas Revolucionarias, segundo
club de su especie. Tras caer en desgracia y ser presa, se trasladó a Nantes,
donde retomó su oficio de actriz. En 1821 fue internada por enfermedad mental,
muriendo cinco años después.
Pauline Léon (París, 1768-Bourbon-Vendée, 1838) fue una
revolucionaria francesa que participó en la toma de la Bastilla con los sans-coulottes. Fue la portavoz de la
reclamación de una Guardia Nacional Femenina armada, y fundó en 1793 con Calire
Lacombe la Sociedad de las Mujeres Republicanas Revolucionarias. Se casó con
Théophile Leclerc, líder de la facción Enragés (furiosos). Ambos fueron
encarcelados unos meses y se trasladaron luego fuera de París.
Émilie du Châtelet (París, 1706-Lunéville, 1749) fue una
matemática y física francesa de la Ilustración. Pareja de Voltaire entre 1734 y
1745, difundió la física newtoniana. Defensora de la educación femenina,
protagonizó el primer debate científico entre un hombre (el cartesiano Dortous
de Mairan) y una mujer. En 1748 escribió el Discurso
sobre la felicidad, donde defiende el entusiasmo, el estudio y la
independencia.
Louise d’Épinay (Valenciennes, 1726-París, 1783), escritora
y salonnière francesa de la
Ilustración, influyó en la filosofía social de su época. Fue amante de Rousseau
y amiga de Diderot y de Voltaire. En sus memorias noveladas (Historia de la señora de Montbrillant,
1769), ofrece una visión crítica de la vida y restricciones de las mujeres de
la alta sociedad.
Anne-Catherine Helvétius (Nancy, 1722-Auteuil, 1800) fue una
escritora y salonnière francesa de la Ilustración. Mantuvo en su casa la
Sociedad de Auteuil, punto de encuentro principal de los últimos filósofos de
la Ilustración, al que acudían Diderot, D’Alembert, Manon Roland, Jefferson,
Franklin o Napoleón. Sin ser una teórica feminista, su papel como dinamizadora del pensamiento liberal la
convierte en una figura crucial del ecosistema intelectual que hizo posible el
feminismo ilustrado.
Manon Roland (París, 1754-1793), revolucionaria francesa del
grupo girondino. En 1791 mantenía un salón literario frecuentado por
Robespierre. Tras la separación en 1793 entre jacobinos y girondinos, fue
arrestada. Escribió en prisión sus memorias, antes de ser guillotinada tras
pronunciar su frase: “¡Oh, libertad, cuántos crímenes se cometen en tu nombre!”.
Aunque no defendió la igualdad de sexos, legó su influencia política femenina.
Sophie de Grouchy (Meulan, 1764-París, 1822). Escritora
francesa que instauró en su casa de París una tertulia filosófica frecuentada
por D’Alembert o Thomas Jefferson. También acogió al Círculo Social, con Olympe
de Gauges, que reivindicaba la igualdad de derechos para las mujeres. Tras el
encarcelamiento y muerte por girondino en 1794 de su marido Nicolas de
Condorcet, publicó Cartas sobre la
simpatía (1798), que trata sobre la empatía e incluye una apología de la
igualdad de la mujer.
Madame de Staël (París, 1766-1817) fue una escritora francesa,
defensora de la igualdad de sexos. Apoyó la Revolución francesa, aunque luego
defendió una monarquía constitucional. En sus novelas Delphine (1802) y Corinne o
Italia (1807) denuncia las dificultades sociales de las mujeres. Napoleón
la exilió en 1803. En su Suiza paterna fundó el Grupo de Coppet, tertulia
liberal en la que participó Lord Byron.
Josefa Amar y Borbón (Zaragoza, 1749-1833), pedagoga y
escritora española de la Ilustración. Defendió la capacidad intelectual y
política de la mujer, así como la importancia de su instrucción. Fue la primera
mujer en ingresar en la Real Sociedad Económica Aragonesa, en 1782. En 1786
publicó el Discurso en defensa del
talento de las mujeres, planteando una nueva asignación de los roles de
género.
María Andresa Casamayor (Zaragoza, 1720-1780) fue una
matemática y maestra española. Hija de un comerciante de Olorón, escribió el
primer manual científico realizado por una mujer en español que se conserva. Fue
en 1738, a los 17 años, cuando publicó Tyrocinio
arithmetico, un libro para aprender matemáticas, con el seudónimo de
Casandro Mamés de la Marca y Araioa, anagrama de María Andresa Casamayor de la
Coma.
Las feministas
ilustradas compartieron los ideales de la Ilustración (razón, progreso) para
exigir educación e igualdad de derechos. Sus escritos
y acciones iniciaron la primera ola del feminismo, dejando un legado
fundamental para la lucha por la ciudadanía femenina y, en fin, para los
siempre deseables anhelos de justicia social.



Comentarios
Publicar un comentario