La izquierda en el poder en el siglo XX
Listado de los períodos en que han gobernado partidos de
izquierda en distintos países del mundo durante el siglo XX, ordenado por la
fecha de comienzo. Se hacen constar los eventos que iniciaron esas etapas, sus
protagonistas principales, sus logros y, en el caso de que ya no permanezcan
esos gobiernos o políticas, su fecha de finalización.
El hito fundacional que llevó a la izquierda al poder en el
siglo XX fue la Revolución Rusa de 1917. Generó el primer estado socialista, con
Lenin como líder, que puso fin al régimen autocrático y feudal de los zares,
expropiando los bienes de la iglesia, la nobleza y la burguesía, y redistribuyéndolos
entre los campesinos. Se estableció la educación y la sanidad gratuita, aumentando
la alfabetización y duplicando la esperanza de vida. Se generalizó el derecho
al trabajo y a la vivienda y se legalizó el divorcio y el aborto.
Fue ampliada como URSS (Unión de Repúblicas Socialistas
Soviéticas, 1922-1991), integrada por Rusia, Ucrania, Bielorrusia, Georgia,
Armenia, Moldavia, Azerbaiyán, Estonia, Letonia, Lituania, Kazajistán,
Uzbekistán, Kirguistán, Turkmenistán y Tayikistán. Y después con los países
comunistas de la Europa del Este: Polonia, Hungría, Alemania del Este, Checoslovaquia,
Bulgaria, Rumania, Albania y Yugoslavia. En los 23 casos, la experiencia supuso
implementar los logros de la primigenia Revolución Rusa, tanto en educación
como en sanidad, trabajo, vivienda y derechos sociales. La URSS se disolvió en
1991. Ver también El paso al capitalismo de los países del
Este.
En 1924 se proclamó la República Popular de Mongolia. El
Partido Revolucionario del Pueblo, con Peljidiyn Genden, colectivizó la
ganadería y expropió las tierras a la nobleza y al clero. Se mejoraron la
educación y la sanidad y se impulsó la industrialización. En 1992 se pasó al
capitalismo, gobernada por socialdemócratas excomunistas.
México tuvo su propia Revolución, que culminó con la vigente
Constitución de 1917, donde se incorporan derechos sociales y laborales. Ya en
1934, el Gobierno de Lázaro Cárdenas implementó la reforma agraria, nacionalizó
la industria petrolera y los ferrocarriles, e impulsó la educación rural y el
sindicalismo. El período finalizó en 1940, aunque no fue hasta unas décadas
después cuando se comenzaron a revertir los logros.
En España, tras una Segunda República proclamada en 1931 con
esperanzas progresistas, la izquierda llegó al poder en 1936 con el Frente
Popular, liderado por Manuel Azaña, pero fue truncada ese mismo año por el
golpe de Estado fascista que provocó la Guerra Civil y llevó al país a una
dictadura que se prolongó hasta 1977, dos años después de la muerte de Franco.
El Frente Popular de Francia, coalición de socialistas,
comunistas y radicales, llegó al poder en 1936 con el socialista Léon Blum. Presionados
por los sindicatos, implementaron la jornada laboral de 40 horas, las
vacaciones pagadas y el derecho a la negociación colectiva. Sus gobiernos
terminaron en 1938.
La Revolución de 1943 en Argentina fue el precedente de los
gobiernos peronistas, de ideología progresista. En ella participó Juan Domingo Perón,
presidente entre 1946 y 1955. El Partido Justicialista (antes Peronista)
gobernó aplicando mejoras sociales y nacionalizó los servicios públicos. En
1973-1976 y 1989-1999 el partido también alcanzó el poder, aunque en este
último período giró drásticamente a la derecha.
En Guatemala se produjo en 1944 la Revolución de Octubre,
que derrocó a la dictadura. Con el liderazgo de Jacobo Árbenz Guzmán, se
modernizó el Estado en beneficio de la clase trabajadora y se efectuó una
reforma agraria. En 1954 se terminó, merced a un golpe de Estado orquestado por
Estados Unidos.
En 1945, Indonesia se independizó bajo el liderazgo de Sukarno, socialista. Implementó
políticas de nacionalización y promovió la educación y la unidad nacional. Se
mantuvo en el poder hasta el golpe de Estado de 1967.
En 1947, la India se independizó del Reino Unido con un
Gobierno socialista democrático de Jawaharlal Nehru. Se impulsó la
industrialización, la reforma agraria, la ciencia y la educación. El período
duró hasta 1991, cuando los nuevos gobernantes impulsaron su plan LPG:
Liberalización, Privatización y Globalización.
Birmania (hoy Myanmar), tras independizarse del Reino Unido
en 1948, fue gobernada por la Liga Antifascista para la Libertad del Pueblo, fundada
por Aung San, que aplicó el Plan de Bienestar del Pueblo, desarrollando la
agricultura y construyendo escuelas y hospitales. Le sustituyó entre 1962 y
1988 el Partido del Programa Socialista de Birmania, que nacionalizó la
economía pero se aisló demasiado.
En 1948, Estados Unidos y la URSS dividieron Corea, quedando
en el Norte la República Popular Democrática de Corea. Está gobernada con los
principios del Juche, una adaptación local del comunismo ideada por Kim
Il-sung, con economía estatal y sistema de salud y educación universal.
Israel proclamó su independencia en 1948, tras la partición
de la Palestina británica por la ONU. Desde entonces hubo gobiernos socialistas
sionistas como el de David Ben-Gurion, hasta 1977. Se implementaron medidas
sociales, seguridad social y se construyeron infraestructuras, mientras se
invadía el entorno a los palestinos. A partir de 1992, el Partido Laborista
volvió unos años al poder.
En 1949, apoyada en el campesinado, se produjo la Revolución
China, de la mano del Partido Comunista de Mao Zedong. Como en Rusia, se llevó
a cabo una reforma agraria masiva, se redujo la desigualdad y se mejoró la
salud y la educación, aumentando la esperanza de vida. En la etapa más reciente
se ha erradicado la pobreza extrema.
En 1951 en Irán, el socialdemócrata Frente Nacional de Mohammad
Mosaddeq ganó las elecciones. Con el apoyo del comunista Partido Tudeh, se impulsó
la reforma agraria, se implantaron mejoras laborales y se nacionalizó el
petróleo. Ello provocó que el Reino Unido y Estados Unidos organizasen un golpe
de Estado en 1953, que instauró la dictadura del sha.
En Bolivia, el Movimiento Nacionalista Revolucionario de Víctor
Paz Estenssoro lideró la Revolución Nacional en 1952. Se nacionalizaron las
minas de estaño, se eliminaron los latifundios y se otorgó el sufragio
universal, incluyendo a las mujeres y a los indígenas. Contó con el apoyo inicial
de los Estados Unidos, que también financió su final mediante un golpe de
Estado en 1964 que revirtió las nacionalizaciones.
Egipto tuvo su propia Revolución socialista en 1952, cuando
el CMR (Consejo del Mando de la Revolución) derrocó a la monarquía y expulsó
del poder a los británicos. Con Gamal Abdel Nasser se promulgó la reforma
agraria y se nacionalizó el Canal de Suez. A partir de 1970, los distintos
gobernantes han ido desmantelando la labor revolucionaria.
En Guyana (Guayana Británica hasta 1966) ganó las elecciones
de 1953 el Partido Progresista del Pueblo, con Cheddi Jagan. Sus reformas
sociales llevaron a Gran Bretaña a destituirle a los cuatro meses. Lo mismo
sucedió en 1961. Tras la independencia de 1966, el socialista Congreso Nacional
del Pueblo de Forbes Burnham instaura la actual República Cooperativa, que en
1985 abandonó el socialismo de Estado.
Tras independizarse de Reino Unido, entre 1957 y 1966 Ghana
tuvo un Gobierno socialista, con Kwame Nkrumah a la cabeza. Se dotó al país de
electricidad e infraestructuras, se impulsó la escolarización gratuita y se
inspiró a otros países para librarse del dominio colonial. Todo terminó con un
golpe de Estado orquestado por Estados Unidos.
Guinea obtuvo la independencia de Francia en 1958, de la
mano del Partido Democrático, con el socialista Ahmed Sékou Touré. Se promovió
el cooperativismo y se implantó la enseñanza obligatoria. En 1978 se abandonó
el marxismo y se viró a Occidente. La etapa se cerró en 1984.
En 1959 llegó la Revolución Cubana con Fidel Castro como
líder, derrocando la dictadura títere de los Estados Unidos. En 1961 se eliminó
el analfabetismo y se implantaron la educación y la sanidad universal. Todo
ello convirtió al país en un símbolo mundial de la izquierda.
En 1960, tras obtener la independencia de Bélgica, el
socialista Movimiento Nacional Congoleño de Patrice Lumumba llegó al poder a la
República Democrática del Congo. Buscó la nacionalización de los recursos
mineros, pero en 1961 un golpe de Estado con apoyo de Estados Unidos y Bélgica,
interesados en los recursos naturales del país, lo derrocó y lo asesinó.
Tras la independencia de Francia en 1960, el Partido
Socialista de Senegal (no marxista), con Lépopold Sédar Senghor, llegó al
poder. Promovió la autosuficiencia económica y el desarrollo cultural. El
partido se mantuvo en el Gobierno hasta el año 2000.
Mali alcanzó la independencia de Francia en 1960 de la mano
de la Agrupación Democrática Africana, con el marxista Modibo Keïta a la cabeza.
Se aplicaron nacionalizaciones y se priorizó la educación y la agricultura. Un
golpe de Estado en 1968 puso fin a este proyecto. Entre 1992 y 2002 gobernó la
socialdemócrata Alianza por la Democracia.
En 1962, el Frente de Liberación Nacional de Argelia
consiguió la independencia de Francia, proclamando la República Argelina
Democrática y Popular. Bajo el mandato de Ahmed Ben Bella, en 1971 se
nacionalizaron los hidrocarburos, se desarrollaron infraestructuras y se
crearon programas avanzados en educación, salud y vivienda.
El Partido Baaz (Partido del Renacimiento Árabe Socialista)
llegó al poder en Siria con la Revolución del 8 de Marzo de 1963, con Salah
Jadid al frente. Se nacionalizaron bancos, industrias clave y empresas
extranjeras. Se invirtió en desarrollo social: educación, sanidad e
infraestructuras. En 2024 el Gobierno de Bashar al-Ásad fue derrocado por
islamistas apoyados por Turquía.
En 1963, el Movimiento Nacional Revolucionario de Alphonse Massamba-Débat llegó al poder
en la República del Congo. Su gobierno proclamó la república. Se implementaron
políticas de nacionalización y se promovió la educación y la salud para todos.
Aunque su período terminó con un golpe de Estado en 1968, la ideología
socialista se mantuvo en el país con otros líderes como Marien Ngouabi, hasta
que en 1992 se pasó al sistema capitalista.
Tanganica y Zanzíbar se unieron en 1964 para constituir la
República Unida de Tanzania, regida según los principios del Ujamaa o
socialismo africano ideado por Julius Nyerere. Se enfocaba en la agricultura
colectiva y las comunidades rurales autosuficientes. Se promovió la educación
universal y la sanidad pública. En 1985 se comenzaron a revertir las políticas
socialistas y se incrementó la corrupción.
Zambia alcanzó la independencia del Reino Unido en 1964. El socialista
Partido Unido de la Independencia Nacional, de Kenneth Kaunda, instauró el “humanismo
zambiano”. Se nacionalizó el cobre y se invirtió masivamente en educación y
sanidad. Este Gobierno terminó en 1991.
En Irak, el Partido Baaz de Saddam Hussein llegó al poder
tras la Revolución del 17 de julio de 1968. Como en el caso de Siria, la
nacionalización del petróleo propició el desarrollo en educación, sanidad e
infraestructuras. En 2003, Estados Unidos invadió el país poniendo fin al
período.
En 1968 se produjo la Revolución Peruana, de corte
socialista nacionalista. Con Juan
Velasco Alvarado al frente se llevó a cabo una reforma agraria masiva,
se nacionalizaron las industrias petrolera y pesquera y se promovieron las
lenguas indígenas. En 1975 todo esto terminó mediante un golpe de Estado.
En 1969 llegó la Revolución Libia de Muamar Gadafi. Se
nacionalizó la industria petrolera, lo que convirtió al país en el más rico de
África, con grandes desarrollos en agricultura, infraestructuras y servicios
sociales. En 2011, una intervención militar de la OTAN liderada por Estados
Unidos le puso fin, inaugurando una etapa de guerra civil, colapso, crisis
humanitaria, presencia del Estado Islámico y paralización de la economía.
En Sudán, en 1969 llegó la Revolución de Mayo, con el apoyo
del Partido Comunista a Yaafar al-Numeiry, panarabista. En 1970 se
nacionalizaron los bancos y las grandes empresas. Pero en 1971 el mismo
Gobierno comenzó una deriva regresiva persiguiendo a los comunistas,
revirtiendo las nacionalizaciones en 1972, e imponiendo la sharia en 1983.
La Revolución de Octubre de 1969 en Somalia llevó al poder
al comunista Mohamed Siad Barre, que en 1976 se convirtió en el líder del Partido
Socialista Revolucionario. Con avances en educación, nacionalización de
industrias, bancos y tierras, todo acabó en 1991, dando paso a la inestabilidad
que perdura.
Con el precedente del Frente Popular (1938-1942), en 1970
triunfó en Chile el Gobierno de Unidad Popular de Salvador Allende. Se
nacionalizó la minería y la banca para redistribuir la riqueza; se expropiaron
los latifundios para entregar las tierras a los campesinos; se potenciaron la
educación y la salud públicas. El proceso fue interrumpido por el golpe de
Estado de 1973 impulsado por los Estados Unidos.
En 1971, Bangladés se independizó de Pakistán y gobernó la
socialista Liga Awami de Sheikh Mujibur Rahman. Se nacionalizaron los bancos y
las grandes empresas y se incluyó el socialismo en la Constitución (hoy
vigente). En 1975 todo esto terminó y pronto se revirtió.
En Ceilán, el Partido de la Libertad de Sirimavo
Bandaranaike ganó las elecciones de 1970. Con la coalición Frente Unido, culminó
la descolonización del Reino Unido en 1972, cambiando el nombre del país a
República Democrática Socialista de Sri Lanka, hasta hoy. Con sistema de
democracia parlamentaria, disfruta de educación gratuita y universal y sanidad
pública.
En Jamaica llegó al poder en 1972 el Partido Nacional del
Pueblo, de Michael Manley, socialista. Se estableció la educación gratuita, la
reforma agraria y la nacionalización de la minería. Merced a la
desestabilización de los Estados Unidos, en 1980 terminó el período.
En 1974 se proclamó la Revolución en Etiopía, con Mengistu
Haile Mariam al frente, derrocando al emperador, nacionalizando la tierra, expandiendo
la educación y creando órganos de poder popular. La República Democrática
Popular de Etiopía se mantuvo hasta 1991, guerra civil incluida, y el país pasó
al capitalismo.
Con la Revolución de los Claveles, Portugal vivió en 1974 el
fin de la dictadura en el poder desde 1926. Los Gobiernos provisionales, que
incluían comunistas, nacionalizaron la banca y la gran industria e iniciaron la
reforma agraria en el sur. Otelo
Saraiva de Carvalho fue una figura clave. En 1976 se aprobó la
Constitución y en la década siguiente los socialdemócratas revirtieron las
nacionalizaciones.
Guinea-Bisáu logró su independencia de Portugal en 1974, y
el Partido Africano para la Independencia de Guinea y Cabo Verde de Luis Cabral,
comunista, gobernó implantando la educación universal. A partir de 1980, ese
mismo partido siguió en el poder durante décadas, convirtiéndose en
socialdemócrata.
Cabo Verde se independizó de Portugal en 1975 y fue una
República Socialista, con el mismo partido que Guinea-Bisáu, que cambió su
nombre a Partido Africano para la Independencia de Cabo Verde. Con Aristides
Pereira en el poder, se implantó la reforma agraria y una gran reforestación.
En 1991 se pasó a la economía capitalista.
Tras independizarse de Portugal en 1975, Angola estuvo
gobernada por el Movimiento Popular de Liberación. La República Popular de
Angola, con Agostinho Neto como primer presidente, finalizó su vida en 1992 y
el MPLA siguió gobernando el país, elegido como partido socialdemócrata. Pese a
la guerra civil prolongada entre 1975 y 2002, se dedicó el dinero del petróleo
también a programas sociales.
El Frente de Liberación de Mozambique fundó la República
Popular tras la independencia de Portugal en 1975. Con Samora Machel al frente,
se nacionalizó la enseñanza, la sanidad y la banca extranjera. Entre 1977 y
1992 hubo una guerra civil, y desde 1984 se adoptó la economía capitalista,
convirtiéndose el FRELIMO en un partido socialdemócrata en el poder.
El Consejo Supremo Revolucionario llegó al poder en
Madagascar en 1975, con Didier Ratsiraka. Se nacionalizó la economía y se
implantaron programas de salud pública y educación. En 1993 acabó el período.
En 1975 fue proclamada la República Popular de Benín por
Mathieu Kérékou, que llevaba en el poder desde 1972. Con el Partido Revolucionario Popular, se
aplicaron nacionalizaciones, se reformó la educación y se crearon cooperativas
agrícolas. En 1990 se pasó al capitalismo.
El Partido Popular Revolucionario de Laos (Pathet Lao) llegó
al poder en 1975, aboliendo la monarquía y colectivizando la agricultura. Bajo
la dirección de Kaysone Phomvihane,
se impulsó la alfabetización y se crearon centros de salud. A partir de 1986 se
fue implementando el socialismo de mercado de modelo chino.
Tras la proclamación de independencia de Francia y la
implantación del comunismo en 1945 bajo el liderazgo de Ho Chi Minh, Vietnam
del Norte se unió a Vietnam del Sur en 1976, creándose la República Socialista
de Vietnam. Tras la reconstrucción del país después de ganar la guerra a
Estados Unidos, en las últimas décadas se ha reducido drásticamente la pobreza.
En 1976, el Frente Polisario (socialista) de El Uali Mustafa
Sayed proclamó la República Árabe Saharaui Democrática, tras la independencia
de España del Sáhara Occidental. La mayor parte fue ocupada por Marruecos. La
Zona Libre y los campos de Tinduf cuentan con acceso universal y gratuito en
educación y sanidad. En 1991, el Polisario se declaró a favor del libre
mercado.
El Partido Democrático Popular de Afganistán, comunista,
tomó el poder en 1978 con la Revolución de Saur, estableciendo un Gobierno liderado
por Nur Muhammad Taraki. Se impulsó la reforma agraria, se fundaron escuelas y se
promovió la igualdad femenina. El sistema duró hasta 1992, cuando
los islamistas entrenados por Estados Unidos llegaron al poder.
En 1979 llegó a Nicaragua la Revolución Sandinista, de la
mano del Frente Sandinista de Liberación Nacional. El Gobierno de Daniel Ortega
aplicó notables avances sociales (reforma agraria, nacionalizaciones, educación
y sanidad), pero Estados Unidos creó un ejército de oposición que sumió al país
en la guerra y la miseria. En 1990 acabó el período, aunque en 2006 el FSLN
ganó las elecciones, restableciendo la gratuidad en educación y sanidad.
En Granada, el comunista Movimiento New Jewel estableció en
1979 el Gobierno Revolucionario del Pueblo, liderado por Maurice Bishop.
Alfabetización masiva, atención sanitaria y nuevas empresas estatales provocaron
en 1983 la invasión de Estados Unidos (Operación Furia Urgente).
La Revolución de los Sargentos de Surinam en 1980, con Dési
Bouterse al frente, instauró una república socialista. Se nacionalizó la
bauxita y se mejoraron la salud y la educación. Sin embargo, a partir de 1983
la deriva fue regresiva, hasta el fin del periodo en 1987, con el triunfo de la
socialdemocracia en las elecciones, aún con la tutela de Bouterse.
Desde su independencia del Reino Unido en 1980, gobierna en
Zimbabue la Unión Nacional Africana. El socialista Robert Mugabe fue su
presidente hasta 2017. Se expandió el acceso a la educación y la sanidad y se
lograron mejoras sociales.
La Revolución de Agosto de 1983 denominó al año siguiente
Burkina Faso al país antes llamado Alto Volta. Bajo el liderazgo de Thomas
Sankara, se vacunó a la población, se alfabetizó, se reforestó y se procuró la
autosuficiencia alimentaria. En 1987 un golpe de Estado apoyado por Francia terminó
con todo eso, instaurando el saqueo y la corrupción.
En 1988, la Organización para la Liberación de Palestina
declaró la independencia. El partido mayoritario de esa coalición, Fatah, socialista
árabe, gobernó el Estado hasta 2005. Con Yasser Arafat al frente, se crearon
hospitales, escuelas e infraestructuras (vivienda y servicios). La ocupación
israelí ha ido destruyendo todo eso, ya desde 1948.
El Movimiento Popular de 1990 en Nepal dio paso a una
monarquía parlamentaria. Entre 1994 y 1995 gobernó el Partido Comunista, liderado
por Man Mohan Adhikari, que implementó proyectos de desarrollo local, creó las
pensiones e inició una reforma agraria. Tras esos 9 meses el país cayó en la
inestabilidad, proclamándose la República en 2008.
En 1994, tras el fin del apartheid en Sudáfrica, el Congreso
Nacional Africano (socialista) de Nelson Mandela llegó al poder, aliado con el
Partido Comunista e implantando la Revolución Democrática Nacional. Se invirtió
en vivienda, educación y salud para la población negra. La coalición sigue
ganando las elecciones hasta hoy.
En Japón, el Partido Socialista de Tomiichi Murayama gobernó en coalición entre 1994 y 1996. Se redujeron
los impuestos a las rentas bajas, pero no se logró nada reseñable más, debido a
la oposición de la derecha coaligada.
La Revolución Bolivariana de Venezuela se produjo tras la
victoria en 1998 del socialista Movimiento V República de Hugo Chávez. Se
pusieron en marcha bancos públicos, se nacionalizó el petróleo, se expropiaron
latifundios, se redujo la pobreza y se mejoró la educación y la sanidad.
En la Europa occidental se pusieron en marcha proyectos
socialdemócratas, para evitar el auge del comunismo en sus países. En esta
economía mixta (propiedad privada y colectiva), el mercado asigna los recursos
y el Estado regula su funcionamiento. Fueron los casos de Islandia (1918-1983),
con líderes como Vilhjálmur Þór; Dinamarca (1924-1982), con figuras como Thorvald Stauning; Noruega (1930-1975),
con Einar Gerhardsen; Suecia (1932-1976), con Per Albin Hansson; el laborista Reino
Unido (1945-1951), con Clement Attlee;
y Alemania (1966-1982), con Willy
Brandt. Se implementaron políticas de protección social, educación y
salud públicas, pensiones y seguridad en el empleo. En todos estos casos, las
alternancias de poder acabaron cercenando muchos de los logros de los llamados
Estados del Bienestar.
Canadá, con su Partido Liberal de William Lyon Mackenzie
King, lleva desde 1921 alternando largos períodos de centroizquierda. Los
gobiernos laboristas de Nueva Zelanda (1935-1949), bajo Michael Joseph Savage; y de Australia (1972-1975), a cargo de
Gough Whitlam, contaron ambos con ambiciosas reformas sociales. Finlandia tuvo
algunas participaciones en el poder de los socialdemócratas, como Väinö Tanner
(1926-1927) o Mauno Koivisto (1982-1994).
En 1981 ganó en Grecia el Movimiento Socialista Panhelénico
(PASOK) de Andreas Papandreu, con reformas hasta 1989 como la legalización del
divorcio, la abolición de la dote y la sanidad universal. Un caso similar fue
el de España, con la victoria del PSOE de Felipe González en 1982, que se
prolongó hasta 1996.
El eurocomunismo intentó aunar la ideología marxista con la
democracia liberal en las décadas de 1970 y 1980. Los partidos comunistas que
se definieron así fueron el italiano, el español y el francés. El PCF de
Georges Marchais gobernó en coalición en Francia con el Partido Socialista
entre 1981 y 1984, cuando se abolió la pena de muerte, se aumentó el salario
mínimo y las prestaciones sociales, se redujo la jornada laboral y se
nacionalizaron empresas clave. Sin embargo, a partir de 1986 el Gobierno conservador
inició un programa masivo de privatizaciones.
Reparto de la riqueza, reforzamiento en educación y sanidad,
mejoras laborales, derechos sociales y otras iniciativas propias de
organizaciones de izquierda salpicaron el mapamundi durante el siglo XX, casi
siempre truncadas y revertidas. Con todas las reservas que se quieran aducir,
fue bonito mientras duró.
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