El cambio climático (1). Los hechos
Datos tomados del documental de la BBC El cambio climático. Los hechos (2019), presentado por David Attenborough.
Nos enfrentamos a la mayor amenaza en miles de años: el
calentamiento global o cambio climático. Al ritmo actual de calentamiento, puede
sobrevenir un futuro devastador. La ciencia tiene claro que se necesitan
acciones urgentes. Se trata de un próximo desastre a escala mundial, obra del
ser humano. Nuestro clima está cambiando debido a un simple hecho: el mundo se
está calentando. Y la causa es el uso de combustibles fósiles: carbón, gas y
petróleo. De ellos procede casi por
completo la energía que consumimos. Cuando los quemamos, producimos dióxido de
carbono, antes llamado anhídrido carbónico (CO2).
Este gas y otros se acumulan en la atmósfera creando un
efecto invernadero, absorbiendo el calor de la superficie terrestre. Su capa aumenta
cada vez más de grosor y con ello la temperatura, que ha subido un grado de
media desde la época preindustrial. Esto produce olas de calor severo, 30 veces
más probables de lo que habrían sido sin el cambio climático.
El 8 por ciento de las especies animales se encuentra
actualmente en peligro de extinción debido al cambio climático. Con su
desaparición desestabilizamos y nos arriesgamos a destruir los ecosistemas, que
son las redes que sustentan la vida en la Tierra.
Los incendios forestales aumentan de forma global, debido a
las condiciones de calor y sequedad producidas por el cambio climático. Al
aumentar la temperatura, se evapora más agua del océano, aumenta la humedad en
el aire y llueve más, en forma de grandes tormentas e inundaciones extremas,
que conllevan catástrofes involucrando a millones de personas. Y cada vez será
peor.
El cambio climático va mucho más allá del clima. El hielo de
la Tierra, congelado desde hace milenios, se está fundiendo. Ahora está
desapareciendo en Groenlandia 5 veces más hielo que hace 25 años, y en la
Antártida 3 veces más. El nivel del mar ha permanecido estable durante varios
miles de años, pero ha subido 20 cm en los últimos 100 años. Ello está
desplazando a cientos de miles de personas de las zonas costeras más
vulnerables. El aumento del nivel del mar se debe también a que el agua se está
calentando. Ello ha provocado también la muerte de un tercio de los corales del
mundo.
En 1988, un grupo de científicos alertó de lo que está
pasando. Las empresas de petróleo y gas lanzaron una campaña negacionista para
desactivar la alerta, que obtuvo un gran éxito. Las emisiones de gases de
efecto invernadero han seguido aumentando, y el problema es cada vez más
difícil de resolver.
El dióxido de carbono es utilizado por las plantas para
crecer, mediante la fotosíntesis. Han absorbido un tercio de nuestras
emisiones. Los bosques son los pulmones del planeta. Pero prosigue la
deforestación para sustituirlos por plantaciones de soja, caucho, pastos para
el ganado y aceite de palma, que se utiliza en muchos productos que consumimos.
Cuando se talan y queman los bosques, se contribuye al calentamiento global. Y
este proceso se está acelerando. Un tercio de nuestras emisiones de dióxido de
carbono está causado por la deforestación.
Si seguimos como hasta ahora, el calentamiento alcanzará un
grado y medio entre 2040 y 2050. Poco después superaremos los 2 grados. Con el
aumento de las tormentas, las inundaciones, las sequías y las olas de calor, la
producción de alimentos será más problemática. Y también será más complicado el
acceso al agua limpia y potable. Las zonas del planeta que más lo sufrirán son
las que no han emitido el CO2 y el hecho es que si los pobres sufren
hoy, los ricos sufrirán mañana. Es un asunto global.
A finales de este siglo, las temperaturas habrán aumentado
entre 3 y 6 grados. 600 millones de personas viven en zonas costeras vulnerables.
Aumentarán las tormentas marinas y desaparecerán las ciudades costeras.
Por otro lado, es muy posible que la selva tropical se
convierta en una sabana. Y hay grandes cantidades de metano almacenadas en el
permafrost del Ártico. Al derretirse, empieza a emerger el metano, que es un gas
de efecto invernadero 21 veces más potente que el CO2.
En la cumbre del clima de París de 2015, todos los países
del mundo acordaron intentar limitar el calentamiento global a un grado y
medio. Para ello hay que reducir a la mitad las emisiones de carbono en 2030, y
llegar a cero emisiones en 2050, sustituyendo los combustibles fósiles por
energías renovables.
Hidroeléctrica, solar y eólica se han abaratado, con la
solar como punta de lanza. Empezando en Alemania y continuando en China, la
solar es la energía más barata ya en 60 países. La nuclear no produce
emisiones, pero sí residuos tóxicos. La eólica le aventaja, y está a punto de
ser tan barata como los combustibles fósiles. El siguiente paso será la
descarbonización de la industria y del sector del transporte. En este último
caso, fabricando vehículos eléctricos y de hidrógeno. Y un reto actual es la
construcción de aviones eléctricos.
Otra tarea es eliminar el CO2 sobrante de la
atmósfera, reforestando. Y reducir la ganadería intensiva, que produce la carne
y los lácteos que consumimos, pero también una gran cantidad de metano.
Nos encontramos en un momento único en la historia de nuestro planeta. Podemos cambiar las cosas, todavía.
Mis artículos sobre el cambio climático:
1. Los hechos
2. Una vez que sabes. El colapso inevitable
Comentarios
Publicar un comentario